Cronología

Todo se remonta hace 17 años en un pueblo agricultor en las afueras de Fiore, un pueblo que en la actualidad ya no existe: Akuma. Este pueblo era conocido por su buena tierra y clima ideal para el crecimiento de los vegetales, pero a pesar de la gran cantidad de dinero que ingresaba gracias a las exportaciones tenía una población muy pobre. Contaban con apenas una escuela, a la cual asistían la mayor parte de niños que podían permitírselo, todo lo demás eran casas pequeñas y grandes hectáreas de cosechas, eso y la gran mansión Nara que desentonaba por su gran lujo y tamaño. No había hospitales pero si había una mujer que, a escondidas de su marido, ayudaba a la gente enferma y utilizaba su magia para ayudar a los pueblerinos, ya que casi todos tenían jornadas de trabajo excesivamente largas y sueldos que incluso los dejaban sin comer los últimos días del mes, no podían gastar en médicos ni para curar las heridas que les provocaban sus propios trabajos.

La razón de la extrema pobreza del pueblo tenía nombre y apellido, Hōsoku Nara, el esposo de la maga curandera y que en su tiempo también había sido un famoso mago, el propietario del 80% de las tierras y quien se quedaba con el 70% de los ingresos. Naomi nació allí, como única heredera de las riquezas de su padre y de las habilidades mágicas de su madre Margaret, al ser la única niña en la gran mansión siempre tuvo a todos los empleados pendientes de ella, no era alguien a quien se le pudiese considerar "tranquila" y, como la mayoría de los infantes era risueña, tenía un algo que hacía que se le perdonaran todas sus travesuras. Pero no todo era felicidad en la pequeña burbuja en la que vivía la joven Nara, al ser hija de quien podría considerarse el "alcalde" de la ciudad no tenía muchos amigos, nadie se le acercaba y cuando ella lo hacía la ignoraban por completo. Bueno, no todos, había un niño de su misma edad con quien podía conversar sin que este se alejara de ella, su nombre era Hikari Sasaki, su único amigo a parte de Jean, el cocinero y Elisa, la anciana ama de llaves.

Su vida habría sido ideal, todo aquello le bastaba para ser feliz, sin embargo, un día común y corriente ocurrió cierto accidente. La gente del pueblo, ya harta de los constantes abusos de Hōsoku decidió revelarse. Fue así cómo para la celebración del séptimo cumpleaños de la castaña los pobladores de la ciudad irrumpieron en la mansión y lo que en un principio sería sólo un robo se tornó en tragedia. El plan inicial de los descontentos trabajadores era robar y asustar a la familia para que mejoraran las condiciones de trabajo de ellos, pero debido a varios factores se salió de control y terminaron incendiando la casa y asesinando a quienes vivían en ella, a todos excepto a la joven Naomi, quien fue rescatada en el último momento por cierto cocinero.

Jean era un hombre albino bastante joven, adulto pero joven y muy trabajador, incluso antes de la tragedia se llevaba muy bien con la castaña y después de aquello su lazo se afianzó aún más. Después de huir del pequeño pueblo en que había nacido comenzó, junto al cocinero, un interminable viaje, gracias a esto la muchacha conoció muchísimos lugares nuevos, hasta el accidente pocas veces salía de casa y aún menos había salido del pueblo. La vida de la pequeña comenzaba de nuevo, pero esta vez la vivía por si misma y tenía la suerte de tener al carismático Jean para cuidarla siempre, a pesar de que mientras pasaba el tiempo y crecía comenzaba a ser cada vez mas tímida y callada el albino siempre supo sacarle su lado infantil, él era un hombre divertido, infantil, extrovertido y muy aventurero e incluso aveces parecía que la castaña estaba cuidando de él.

Gracias a todo aquello la jovencita pudo superar con bastante rapidez aquél traumático incidente, si bien jamás fue muy apegada a su padre era muy dependiente de su madre. Sobrevivieron en base de pequeños trabajos o encargos que realizaban de vez en cuando y de una fuente de ingresos secreta del cocinero (Naomi sospechaba que trabajaba a escondidas para no hacerla sentir mal y ciertamente estaba en lo correcto). Además de diversión y descubrimientos en los viajes la muchachita aprendió muchísimas cosas, entre ellas magia, si bien Jean era un mago de bajo rango le inculcó sus escasos conocimientos a la pequeña, ya fuese explicándole lo que sabia sobre algunas magias o de vez en cuando para las fechas especiales regalándole libros. Aquella vida que mantenían ambos hacía muy feliz a la castaña, no necesitaba amigos porque tenía a Jean y a pesar de que este le insistiera que debía hacer vida social la joven era demasiado tímida y se trababa sin siquiera decir hola.

Luego de tres años de felicidad ocurrió la peor desgracia en la vida de Naomi. Estaban de viaje como siempre, esta vez de camino a Magnolia, Jean había sentido curiosidad por un gremio que, según había leído, hacía poco había perdido a sus magos más poderosos, de los cuales no se sabía nada. Iban en el tren, en medio del bosque cuando un grupo de ladrones detuvo y se adueñó del tren para robar mercancía. Era una banda de ladrones organizada y comandada por un gremio oscuro, la pequeña Nara había querido hacer algo al respecto de la agresividad de los ladrones pero todo había salido mal, al ser pequeña pudieron derribarla fácilmente y en un afán de protegerla uno de los hombres dio muerte al mago que cuidaba de ella.

Con suerte la joven pudo huir, con la única habilidad de viento que aprendió pudo aumentar su velocidad y dejar atrás a los agresores. Por utilizar poder mágico sin experiencia ni suficiente entrenamiento quedó inconsciente en el bosque y no despertó si no hasta tres días después. Hambrienta, con mucha pena y sin energías caminó todo el trayecto que faltaba hasta Magnolia y se dirigió inmediatamente hacia el gremio. A penas se asomó por este cayó desmayada y hasta horas después despertó cuando le intentaban dar agua.

Se quedó allí durante 7 años, entrenando y ayudando en lo que pudiese mientras poco a poco el gremio se hundía más y más, hasta que cierto día pasó lo impensable: Los antiguos magos regresaron. Durante las primeras semanas la maga se limitaba a admirarlos desde lejos por miedo a acercarse, pero un día cierta rubia se le acercó y la saludó, entonces todo mejoró aún más para la castaña. Comenzó a integrarse un poco más y la maga celestial a quien Naomi admiraba mucho la invitó a su primera misión real. Desde entonces nació una bella amistad y luego de un tiempo formaron el "Team NaoLu".

Al no ser muy fuerte no participó de los juegos mágicos, y para cuando los dragones llegaron lo único en lo que pensó fue en su familia, todos los magos de Fairy Tail. Luego de intentar luchar contra los dragones junto a sus compañeros de gremio y de fracasar se resignó a los planes de Mavis y Ultear y prestó su poder mágico para ello. Luego del sacrificio de la maga del tiempo junto a Lucy se dedicaron a cooperar en lo que pudieran por el bien de los ciudadanos. Si bien la maga sigue teniendo la sensación de que todo aquello fue un sueño hay ruinas y destrozos que le recuerdan que no lo fue.